En la crisis lo que se espera es no verse afectados, es por esa razón que muchos ciudadanos han decidido retirar sus depósitos de las entidades financieras. Al hablar de cifras podemos decir que se han retirado este año más de 50 millones de los bancos.
Se podría decir que se está viviendo la mayor fuga de depósitos en un periodo similar desde que arrancó en el año 2003 la serie histórica que elabora el Banco de España.En el caso de la ciudad de Valencia se retiraron 55,8 millones de euros diarios de los bancos, cajas de ahorros y cooperativas de crédito en los tres primeros meses del año aproximadamente.
Se ve claramente el efecto provocado por la crisis de entidades como el Banco de Valencia, que fue intervenida en noviembre del pasado año, o de Caja Mediterráneo, cuya adquisición por parte del Sabadell no recibió el visto bueno de las autoridades comunitarias hasta hace apenas un par de semanas. Además hay que contemplar los posibles efectos derivados de la nacionalización de Bankia o del rescate financiero a la banca española.
La retirada de ahorros ha resultado especialmente pronunciada en la región de Valencia, en relación a otras autonomías españolas debido a que las entidades financieras que mayor cuota de negocio controlaban históricamente -Bankia, CAM o Banco de Valencia- han sufrido especialmente los efectos de la crisis por la depreciación de sus activos y la caída de sus ratings, lo que les ha abocado a necesitar inyecciones públicas de capital.
Situación de Valencia:
La salida de más de 5.140 millones de euros de las cuentas corrientes de empresas y particulares ha reducido el peso del ahorro de la Comunidad Valenciana en el conjunto de España al 8,04 por ciento, el porcentaje más alto de la historia. A pesar de que los últimos meses las entidades financieras han puesto en marcha agresivas campañas para captar pasivos y lograr de esa forma liquidez, la respuesta de la clientela ha sido totalmente inversa al objetivo perseguido, con la citada fuga de capitales.
Situación Bancaria:
En este sentido, el grueso del ahorro se centra en el segmento de particulares y empresas, con un total de 92.102 millones de euros, frente a los poco más de 2.914 millones que tienen depositadas las Administraciones Públicas.
En el sector privado, la mayoría del ahorro continúa derivándose a productos a plazos para la obtención de rentabilidad. Los depósitos se reparten de la siguiente manera:
– Cuentas a la vista -16.447 millones de euros-
– Tradicionales cartillas de ahorro -20.915 millones de euros-.
La situación real tiene que ver con un pánico entre los ahorrados por la crisis del sistema financiero, los valencianos se han empobrecido en los últimos siete años. De hecho, los datos difundidos por el Banco de España también constatan que los préstamos concedidos por el sistema financiero han retrocedido en el primer trimestre del año hasta la cifra más baja desde el ejercicio 2006.
Si analizamos el año 2011, los créditos concedidos por la banca a empresas, administraciones y particulares han descendido en más de 6.612 millones de euros (el sistema financiero ha reducido en dieciocho millones de euros la financiación que ofrecen a sus clientes).