Frente a la propuesta del Banco Malo con el fin de salvar las entidades bancarias, muchos se preguntan, ¿Quienes participarán en el capital del banco malo?
En primera instancia, la llamada Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), gestionará los activos inmobiliarios dañados de las entidades en proceso de reestructuración y resolución para su gestión y posterior venta ordenadas. Podemos decir que habrá participación extranjera en el capital del banco malo español.
El Gobierno tiene sobre la mesa ya una petición formal por parte de un grupo de grandes fortunas de Hispanoamérica, entre las que no está el multimillonario mexicano Carlos Slim. Se intenta suavizar las condiciones para atraer inversores extranjeros a la Sareb, sociedad diseñada con el objetivo de que la mitad de su capital sea privado. Por eso, para evitar poner la mínima cantidad de dinero público, se buscan fórmulas atractivas para los inversores extranjeros -como incluir exenciones y beneficios fiscales para estos inversores-que hasta el momento se muestran reticentes.
La realidad es que posibles inversores extranjeros aporten unos 500 millones, el 10% de los 5.000 millones necesarios para el funcionamiento de la sociedad. Mil millones serán capital directo -que aportarán los accionistas que se incorporen al capital- y el resto (4.000 millones) deuda subordinada.
Por esa razón fijaron el día 30 como fecha para anunciar los accionistas definitivos. Se activó un plan por el que algunos bancos de inversión que operan en España saldrán a la búsqueda de potenciales inversores extranjeros con estos incentivos en la mano.
Participantes confirmados dentro del Sareb:
Estarán en el capital de la Sareb:
- Banco Santander
- La Caixa
- Sabadell
- Kutxabank
- BBVA.
Tanto BBVA como la formada por la fusión de las cajas vascas aseguran que la decisión de entrar en el capital de la sociedad que gestionará los activos tóxicos de la banca española, está aún en estudio y no hay una decisión tomada, porque tienen también sobre la mesa tanto la entrada en su capital como en sus órganos de gobierno. Ambas entidades coincidieron en que la entidad actuará como siempre en interés de sus accionistas y de las sociedades en las que opera.
En el caso del Banco Sabadell hubieran preferido que la Sareb fuera pública para deslindar al banco malo de los buenos, pero la entidad analizará su posible entrada en la sociedad dependiendo de si conviene a la entidad y al sistema financiero.
Se calcula que la Sociedad de Gestión de Activos (banco malo), tendrá un balance de entre 40.000 y 60.000 millones de euros, por lo que se constituirá como una entidad de capital mediano.
Se espera una rentabilidad razonable de esta nueva sociedad, que deberá estar en funcionamiento a principios de diciembre, porque el objetivo no es vender a cualquier precio los activos que las entidades nacionalizadas o recapitalizadas traspasen al ‘banco malo’, que serán valorados de una manera relativamente conservadora.
Se habla de cálculo de flujos esperados en condiciones razonables futuras, haciendo alusión a que el ‘banco malo’ tendrá una vida de unos quince años para poder deshacerse de sus activos, lo que a su juicio da suficientes probabilidades de revalorización.