Las participaciones preferentes son un producto financiero complejo que aúna características de la renta fija y de las acciones. Su principal característica, y la que ha generado la mayor controversia, es su carácter perpetuo. O, dicho de otro modo, que no tienen fecha de vencimiento. Por tanto, si quieres recuperar tu dinero tienes que ponerlo a la venta y esperar a que alguien lo compre. Eso sí, al precio que marque el mercado secundario, que puede ser muy inferior al capital inicial aportado.
Además, se trata de productos no garantizados por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), por lo que, si el banco quiebra, puedes despedirte de tu dinero.
Para cubrir este riesgo, suelen ofrecer rentabilidades más elevadas que las de los depósitos a plazo fijo. Sin embargo, esto no es así por norma: La Caixa, sin ir más lejos, ofrecía preferentes con una rentabilidad del 3%, muy por debajo de lo que rentan los mejores depósitos.
En la actualidad la banca deberá canjear obligatoriamente sus preferentes por acciones o bonos convertibles. La intención del Gobierno es regular en un real decreto los supuestos en los cuales las entidades emisoras de participaciones preferentes u obligaciones subordinadas deberán ofrecer su canje por acciones o por obligaciones subordinadas previsiblemente, bonos necesariamente convertibles en renta variable de la entidad emisora.
En tiempos de crisis, con respecto a los preferentes hay que prestar atención a lo siguiente:
- Si la entidad emisora no tiene beneficios ese año, no se cobra el cupón
- Estos productos cotizan en un mercado secundario en el que, para recuperar la inversión, hay que ponerlos en venta. Si la cotización está baja se puede perder una parte del capital
- Si se dan muchas órdenes de venta y casi ninguna de compra, resulta prácticamente imposible recuperar el capital
Cada entidad financiera ha presentado sus propias ofertas para canjear preferentes por productos que les ayuden a reforzar su capital. Estos son los principales bancos cuyo canje ha trascendido:
- Santander. Canje por acciones respetando el 100% del nominal a finales de 2011. Una de las operaciones más discretas y sin apenas revuelo
- Banc Sabadell. Canje por acciones respetando el 90% del nominal, con la opción de recibir un 12% en caso de mantener las acciones hasta el 14/12/2012. Operación poco polémica
- La Caixa. Canje por obligaciones subordinadas y bonos convertibles en acciones respetando el 100% del nominal. El 30% se cambió por bonos convertibles en acciones (50% con vencimiento en junio 2012 y 50% en junio 2013) y el 70% restante en obligaciones subordinadas a 10 años. Causó gran polémica por su baja liquidez
- CAM. Canje por acciones del Banc Sabadell (banco al que se ha adherido) respetando el 100% del nominal, con un 6% adicional en efectivo por cada año que se mantengan las acciones (hasta 4 años)
- Banca Cívica. Canje por obligaciones convertibles en acciones de Banca Cívica (o de Caixabank, si ya no cotizan) respetando el 100% del nominal.
- Bankia (primera ola de canje – marzo 2012) Canje por acciones de Bankia respetando el 100% del nominal si se mantienen un año. Si no, sólo se canjea por el 75% del nominal
- Bankia (segunda ola de canje – junio 2012) Canje por depósitos a 4 años no cancelables respetando el 100% del nominal y con una rentabilidad total del 5%
- Banco Popular. Canje por bonos convertibles en acciones, respetando el 100% del nominal. Rentabilidad del 6,75% anual. Ventanas de conversión semestrales con límite en abril de 2018
- Caja España-Duero. Canje por depósitos a plazo fijo no cancelables a 5 años, respetando el 100% del nominal. Su rentabilidad oscilará entre el 1,50% y el 2%