Se empieza a especular, y mucho, con un reajuste en los préstamos hipotecarios a la baja, en el que los diferenciales aplicados a las hipotecas a tipo de interés variable, definitivamente acabarán por atravesar y romper la barrera del 2%.
El motivo fundamental de estas especulaciones tiene que ver con los movimientos de varias entidades financieras de nuestro país que, efectivamente, han lanzado en los últimos meses productos que rompían con la media de lo ofrecido hasta ahora, productos que sin duda están en el origen de esa especie de vuelta al interés (habrá que calibrar la intensidad) por los movimientos en las hipotecas.
Son cuatro los movimientos más interesantes en forma de lanzamiento de productos en este sentido:
El primero de ellos, por cuanto además fue el primero en el tiempo al lanzarse en los últimos meses del pasado año 2013, es la Hipotica de Bankinter. Se trata de una hipoteca tipo variable que nos presenta un Euribor + 1.95% que en su momento dio mucho que hablar ya que, se trataba de la primera hipoteca no vinculada a la compra de vivienda de la entidad que en esas fechas rompía con el diferencial del 2%.
Posteriormente, y reduciendo de manera sensible el diferencial, apareció en el mercado la Hipoteca Euribor + 1.25% de CajaSur, que obviamente se convertía de inmediato en un producto referencia de esta tendencia ya que reducía de manera más que sensible el precio de los intereses del préstamo.
Y ya en este año 2014 nos encontramos por la incorporación a la tendencia de Santander con una hipoteca Euribor + 1.99% y por otro lado, con el primer lanzamiento en años de una hipoteca a tipo fijo que además se aleja mucho de los intereses de las existentes en el mercado actualmente, nos referimos a la Hipoteca tipo fijo de Kutxabank, un producto muy bien recibido que puede alcanzar un tipo de interés fijo del 3.89% TIN.
¿Esto es tendencia de verdad?
No nos pongamos demasiado rápido el calzado de correr. Es cierto que existen mimbres suficientes para pensar que no estamos ante hechos aislados, es decir, podemos entender que en los próximos meses vamos a ir encontrando la incorporación que otras entidades al lanzamiento de productos en sintonía con los anteriores, sin embargo, esto no significa, al menos a fecha de hoy, que necesariamente vayamos a asistir a un gran aumento en la contratación de préstamos hipotecarios que, recordemos, llevan cayendo en acumulación año tras año desde el inicio de la crisis.
Por otro lado, si bien es cierto que estamos ante productos que se alejan de la media de lo ofrecido hasta ahora, se trata también de hipotecas que exigen al usuario unos altos niveles de vinculación, con, lo que de contratación de productos en paralelo en la mayoría de los casos supone, lo que a la postre y dependiendo por supuesto de cada caso particular, puede llegar incluso a equilibrar los costes generales de una operación de compra de vivienda en lo que a financiación se refiere.
En definitiva, como noticia, es positivo y motivo de atención el hecho de la aparición de estos préstamos y su posible continuidad a partir de la oferta de otras entidades, sin embargo, probablemente aún estamos muy lejos de la normalización y adaptación a los tiempos que la oferta de estos productos realmente necesita.