Sabemos que la historia de España marca notoriamente lo perjudicada que se encuentra la banca española. Podríamos decir que hace tres años consecutivos hay un descenso de beneficios para la banca española. Como consecuencia, las entidades entraron en números rojos en el último trimestre del ejercicio. Por dicha situación se necesita encontrar un fin a la reestructuración del sector financiero.
En base a la situación de crisis, el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, ha solicitado al Ejecutivo presidido por Mariano Rajoy que acabe con dicha reestructuración financiera inacabada y que lo único que hace es generar riesgo. Para poder argumentar si petición remarcó que no hay un rumbo preciso después de muchos decretos ley en el último año.
Por supuesto que Miguel Martín no dudo en contestar a dicha petición y su respuesta no fue muy favorable, ya que en la presentación del balance anual de la asociación, incidió en que la AEB no tiene que ser quien marque cómo debe reestructurarse el sistema financiero.
Si se tiene en cuenta la posición de AEB, no buscan interferir en el proceso, sino que piden a las autoridades que hagan un diseño y que alguien tiene que tomar el timón, por ende, sólo se podrá hablar de éxito si las entidades viables salen reforzadas. Dichas refutaciones fueron dadas por el presidente de la patronal bancaria.
Se tuvo en cuenta que AEB presentara la condición básica de que se respete la competitividad en el sistema, con un número suficiente de entidades sólidas y rentables que compitan entre sí. Por ello, hizo un llamamiento para que se aclare el origen de los recursos que costeen los rescates de las entidades intervenidas, bien del Fondo de Garantía de Depósitos, creado por las aportaciones de las entidades, o bien del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que se nutre de fondos públicos.
Se planteó que las autoridades deben de decir si se hace con el FROB, que es el vehículo que se creó para esa finalidad específica, o con el Fondo de Depósitos.
Por otra parte, el presidente de la patronal bancaria también felicitó a La Caixa por la compra de Banca Cívica, operación que dará origen al mayor banco español por activos, pero también felicitó al Banco Popular, que lo hizo antes y aún mejor cuando absorbió al Banco Pastor.
Con respecto al tema sobre la dación en pago propuesta por el Gobierno, el presidente explicó que son partidarios de suscribir el código de buenas prácticas, aunque recalcó que los bancos asumen funciones contra la exclusión social que no les corresponden.