El Edificio España, el enorme rascacielos de 117 metros que se eleva ante la homónima plaza madrileña y que desde hace ocho años se encuentra vacío por dentro, ha sido vendido al multimillonario chino Wang Jianlin por parte del Banco Santander.
El cierre de la operación fue confirmado ayer por el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, quien añadió que la venta del edificio al empresario chino puede ser resultar un revulsivo para esa zona de a capital española, además de constituir una nueva demostración de confianza en nuestro país por parte de los inversores asiáticos.
Aunque este dato no ha sido confirmado, algunas informaciones apuntan a que Emilio Botín pudo haber recibido una oferta de 620 millones de euros por el emblemático inmueble, que desde su construcción en el año 1953 ha albergado en su interior un hotel, un centro comercial y oficinas, además de viviendas y apartamentos, pero que desde el año 2006 se encuentra vacío, después de que fracasara el proyecto de convertirlo en un gran hotel y un complejo de viviendas de lujo en el año 2010.
Precisamente Wang Jianlin, propietario de la mayor fortuna de China y potente inversor en países como Estados Unidos o el Reino Unido, parece estar interesado en implantar en el rascacielos un centro comercial, entre otros posibles usos que sin duda tendrían cabida en la mole de 25 plantas y 117 metros que recientemente ha sido calificada por los madrileños como el edificio más infrautilizado de la capital.
Mientras se terminan de confirmar los detalles de la operación, queda la opción de hacer conjeturas sobre los posibles próximos destinos de un inmueble que, en el momento de su construcción, fue el rascacielos más alto de Europa. Observando la trayectoria del magnate chino, resulta factible adivinar para el Edificio España un futuro como centro comercial, con sus cines y locales de ocio, así como tal vez un hotel y viviendas.