Final feliz para la novela de integración de Banco Base, Cajastur y la CAM han llegado a un acuerdo por el que solicitarán 2.784 millones de euros al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB). De esta forma, la entidad podrá cumplir con las exigencias de capital establecidas por el Gobierno.
Horas atrás, este cruce de opiniones mantenía en peligro la unidad de Banco Base, por lo que parece han superado sus discrepancias respecto a la valoración de activos de la CAM y mantendrá su peso en el nuevo banco según lo pactado en el acuerdo inicial.
Vale recordar que este SIP tiene mayoría en peso entre Cajastur y la CAM con un 40% en participación respectivamente, mientras que Caja Extremadura con 11% y Caja Cantabria con 9%, complementan la fusión fría.
Banco Base cierra así una semana conflictiva y podrá presentar su plan de estrategia al Banco de España, en el que prevé cubrir con fondos públicos su necesidad de capital de 1.447 millones de euros para alcanzar el requisito de capital del 10%, umbral del que se aleja en 1,8 puntos porcentuales.
Con esté plan, Banco Base no saldrá a Bolsa, por lo que Cajastur ha ganado la pulseada y recurrirán a las ayudas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), ya que sostenían que los números de la CAM ensombrecían la salida al parqué por lo que el coste por acudir a las ayudas públicas era menor.
Las diferencias estaban repartidas en dos grupos. Por una lado, liderados por Cajastur apoyaban que fuera la CAM la que asumiera la mayor parte del peso del recurso a las ayudas públicas, lo cual se traducía en la nacionalización parcial de la entidad y la entrada de consejeros de este organismo en el banco.
En la otra orilla, la caja alicantina atribuía las discrepancias a la intención de Cajastur de reducir el peso de la CAM en la fusión.