Una de las pesadillas recurrentes de mucha gente es quedarse sin dinero en el banco. Porque no solo significa que nos habremos quedado sin ahorros, sino que también nos tendremos que enfrentar a los cargos del banco. Sí, el banco nos cobra por tener un descubierto en la cuenta, o lo que es lo mismo, por estar en números rojos. ¿Pero cuánto nos cuesta estar en números rojos y por qué nos sigue cobrando el banco a pesar de no tener dinero?
Cuidado con el banco si te quedas en números rojos
Un gasto que no esperabas, una mala gestión financiera, las compras con tarjeta de crédito…. A veces no controlamos bien nuestros movimientos bancarios y acabamos por dejar la cuenta con un saldo negativo.
Pero nuestros problemas solo acaban de empezar. Si dejamos la cuenta en números rojos por el motivo que sea, nuestra entidad bancaria nos aplicará hasta tres penalizaciones:
- Comisión por descubierto. Es un porcentaje que se aplica al importe máximo que alcanza el saldo negativo, dure lo que dure la situación. Normalmente, es del 4%.
- Intereses de demora. Cuando tenemos la cuenta en números rojos, el saldo negativo es como una especie de crédito que nos presta el banco para saldar las deudas más urgentes. Es decir, es como un préstamo y, por lo tanto, la entidad nos cobra unos intereses en función de la deuda y el número de días que dura la situación.
- Comisión por reclamación de la posición deudora. Tiene un coste fijo de entre 15 y 45 euros en función del banco, que se justifican por los trámites de comunicación de la situación. Se cobra a partir del tercer día del descubierto, pero no todas las entidades lo aplican.
Sin embargo, la comisión por descubierto y los intereses de demora no pueden superar 2,5 veces el coste del interés legal del dinero fijado por el Gobierno cada año. El interés legal en 2022 es del 3%. Esto significa que el porcentaje máximo que nos puede aplicar sobre los descubiertos es del 7,5%.
¿Cómo puedo evitar quedarme en números rojos para que el banco no me pase la factura?
Para evitar quedarnos en descubierto es necesario planificar los gastos, no abusar de las compras con la tarjeta, activar las notificaciones y revisar periódicamente nuestros movimientos bancarios. Asimismo, también debemos procurar tener siempre una cantidad mínima en la cuenta bancaria y cerrar todas aquellas que no usamos.
Además, si vamos a tener que afrontar algún gasto o esperamos recibir una factura especialmente cara (como las últimas facturas de la luz) y nos queda poco dinero en el banco, nos queda la opción de recurrir a los microcréditos. Este práctico método de financiación nos ayuda a conseguir pequeñas cantidades de dinero por internet en solo unos minutos. Si tememos quedarnos sin dinero en la cuenta del banco, pueden ser la solución perfecta. Y la más rápida.