Caja Laboral ha obtenido en el primer semestre un beneficio de 35,1 millones de euros después de impuestos, frente a los 60,4 millones que registró en el mismo periodo del ejercicio 2009, lo que supone un descenso del 41,8%.
La entidad ha informado que ha mantenido su morosidad en el 2,9%, mientras que en el primer semestre de 2009 ésta fue del 2,68%.
En cuanto a la inversión crediticia, el crédito total a clientes se eleva a 16.347,1 millones de euros, con un descenso del 0,9% (en el mismo periodo de 2009 esta cifra se situó en 16.494,4 millones).
En cuanto a la financiación a las familias, ha incrementado la inversión en préstamos hipotecarios un 1%, mientras que en lo referente a empresas, el total de créditos y préstamos concedidos se ha reducido en un 0,4% interanual, a pesar de que se ha habilitado la Línea Caja Laboral Liquidez por importe de 300 millones de euros.
Respecto al volumen de negocio, la caja ha incrementado la captación de depósitos de clientes en un 3,6%. De este modo, el volumen de negocio gestionado se eleva a 34.848 millones de euros, un 1,4% más que el año anterior. Uno de los productos que ha contribuido de manera significativa ha sido la Cuenta Max.
En lo que se refiere a la morosidad, la tasa de la caja sigue conteniéndose por debajo del 3%, concretamente se sitúa en el 2,95%, entre las más bajas del sector, cuya media en el mes de abril era ya del 5,39%.
La entidad ha destacado que se sitúa entre los seis bancos y cajas más solventes en términos de Tier 1, con un 10,8%, ratio que refleja el nivel de recursos propios de primera categoría entre los activos ponderados por riesgo, es como media del 7,2% en el caso de las cajas.
El margen básico, que refleja los resultados del negocio recurrente, ha descendido en un 18,9% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, a consecuencia de la caída de los tipos de interés, que ha sido en parte compensada con el incremento de los rendimientos por servicios que aumentan un 1,8%. El margen ordinario alcanza los 188,4 millones.
Finalmente, la caja ha afirmado que la contención de los gastos de administración, que descienden en un 5,1%, sitúa el índice de eficiencia, entendido como el porcentaje que los gastos de administración absorben un buen margen ordinario, en el 45% y ha añadido que, pese a que su tasa de morosidad se sitúa en el 2,95%, sigue con su «política de prudencia», por lo que ha realizado dotaciones en el primer semestre por 64,7 millones de euros.